Alianza Lima – Cristal 1995: Campeones por una peladita
El 10 de diciembre de 1995, Sporting Cristal logró por última vez un bicampeonato -que un año después convirtió en tricampeonato-. Lo hizo frente a Alianza Lima, con el que empató 2-2 luego de remontar dos goles en contra gracias a un tanto del paraguayo Pedro Garay.
Sporting Cristal tenía mucho por ratificar en la temporada de 1995. Y es que luego de ganar de forma brillante el título del año anterior, al cuadro rimense se le dio la oportunidad de volver a alcanzar el éxito al mantener a buena parte del equipo que se proclamó campeón con Juan Carlos Oblitas como DT.
Una lucha tenaz se mantuvo ese año entre Cristal, Alianza Lima y Universitario hasta llegar a la fecha 41, cuando por el Octogonal que definió el campeonato se tuvieron que enfrentar celestes y blanquiazules, a los que separaban, léelo bien: «once puntos» en la tabla a falta de cuatro jornadas.
Los Celestes del Rímac llegaron a ese partido en el estadio Nacional luego de tres triunfos consecutivos, mientras que Alianza venía de caer con Cienciano en el Nacional.
Aún así, los íntimos salieron muy motivados a luchar por el resultado y durante el primer tiempo se llevaron de encuentro a su rival, con una gran actuación del autor de los goles: Jorge Ramírez, quien aprovechó dos rebotes en el área, ambos cedidos por Julio César Balerio tras remates de Waldir Sáenz. .
Transcurridos 27 minutos del partido y con el 2-0 en el marcador, parecía que Alianza iba a posponer el festejo celeste por al menos una semana más.
Sin embargo, un minuto después llegó el descuento de Julinho, quien se encontró con el balón frente al arco tras un error de Frank Ruiz al depejar la pelota.Asi se fueron al descanso.
Recién con el comienzo del complemento fue que se decidió la suerte de ambos equipos, pues a dos minutos del reinicio Cristal tuvo un tiro libre por izquierda que cobró Germán Pinillos.
El ‘Machi’ sacó un centro corto hacia el primer palo del arco defendido por Francisco Pizarro, y fue ahí donde se zambulló Pedro Garay para hacer ingresar el balón.
Aquel tanto fue el 2-2 con el que culminó el encuentro y el resultado que necesitaban los cerveceros para campeonar y rendir homenaje a Ricardo Bentín Grande, expresidente rimense que falleció en diciembre del año anterior.