Historia del Extremo Celeste
Corrían los inicios de 1991, cuando ganamos las elecciones en la Barra Oriente, éramos unos muchachos (Peloduro, César, Rolo, Jeffrey, Chucky, Fernando, Pablo, Saulo, Pancho, entre otros) que no se sentían contentos con lo que era el grupo que formábamos hasta ese entonces. Teníamos muchas ideas pero la principal era hacer crecer la barra, tanto en cantidad como en calidad.
Sin embargo teníamos un escollo importante, «los mayores, los tíos, o los viejos» como quieran llamarlos ellos llevaban tiempo en la barra y eran una de las causas del aburguesamiento en el que estábamos, o sea eso de ir a Oriente, recibir su entrada, sentarse, y aplaudir o gritar un gol nada más.
Pues eso no era lo que se necesitaba, teníamos que concientizarnos primero en crecer (éramos a lo mucho 80 o 100) ¿cómo lo lograríamos? pues buscando que todos aquellos hinchas celestes que no podían pagarse una entrada de oriente se unieran a nosotros o sea yendo a la Popular.
Tomamos la decisión en reunión de directiva, luego la presentamos a la asamblea general, donde habíamos dispuesto que toda la muchachada esté presente para la hora de la votación ya que sabíamos que los tíos no iban a aceptar el cambio.
Así que paso tal como lo habíamos planeado los tíos patalearon, se quejaron pero al final todo quedaba a votación donde salimos ganando (bueno en realidad ganó toda la hinchada).
Ahora tocaba ir al club a comunicar la decisión, hablamos con Pancho Lombardi y con “Cachito” Ramírez, nos dejaron ver su preocupación por lo que el cambio podía originar (obviamente sabíamos que las gallinas ya estaban instaladas en norte y los patos en sur pero eso era algo que ya teníamos previsto).
El plan era el siguiente cada integrante de la barra tenía que traer a todos aquellos familiares y amigos que conociera como hincha de cristal para abonarlos como barristas, a su vez Peloduro se encargó de recorrer el Rímac en especial los cerros ubicados a la espalda del club y las zonas populares del distrito llámese: Pizarro, Virú, Próceres, Trujillo, es decir, todo el tradicional Rímac (de donde teníamos referencia de la existencia de muchos simpatizantes que nos podían ayudar).
Es así que para el primer partido de la temporada 1991, nos tocó enfrentar al Hijos de Yurimaguas en el «gallinero de Breña».
CARAJO!!! que inmensa alegría me da recordar que, de 80 que éramos en oriente, habían más de 600 hinchas listos para comenzar una temporada al lado del equipo, y lo principal todos eran gente muy joven, con mucha fuerza y entrega por la Celeste.
Estrenamos canciones nuevas, las «tripas» o «tiras», y toda la fuerza de nuestras gargantas para alentar a los nuestros. Fue un día de fiesta total…pero, (siempre hay un pero)…
Aun no pisabamos la tierra que queríamos…. LA TRIBUNA POPULAR. Porque en este primer partido estuvimos en oriente en la pocilga desteñida de Breña.
Sin embargo, no tuvimos que esperar mucho y la oportunidad se presentó un memorable 3 DE ABRIL DE 1991, jugamos contra los gansos del callao y ganamos 4 a 2 con un gol del artista Antón y tres de la Pepa Baldessari.
Aquel día marcó para siempre la vida de quienes verdaderamente tenemos este sentimiento en el corazón, esta pasión por la gloriosa Celeste. Los que tuvimos la dicha de estar presentes podemos ahora contarle a las nuevas generaciones como la gente llegaba de todos los barrios de Lima, con las caras pintadas, polos, gorros, vinchas, unos bebiendo cerveza y otros ron.
Les propongo que… cierren los ojos y recuerden su “primera vez”, su “primera experiencia”, que tal la pueden sentir o no?
Pues así es como la sentimos nosotros, pisar por primera vez la popular como Barra y con un triunfo fue un extascis, la celebración fue en grande, nos reunimos en la Florida con todos los fundadores que hicieron posible esta propuesta.
Los cada vez más numerosos hermanos celestes (que hoy por hoy siguen escribiendo la
historia del Extremo) jamás deben olvidar que sus antecesores lucharon por un
sueño que costó muchísimo de realizar y nunca deben dejar de luchar por el
espacio ganado en base a sangre, sudor y lágrimas deben demostrar que la FUERZA
DE CRISTAL está en sus corazones y tengan confianza que los guiará siempre hacia
adelante.
porque…
Barras hay muchas, pero EXTREMO solo hay uno.
Att. La Vieja Gvardia
Fvndadores de una paSCión, Gvardianes del Sentimiento Celeste.