El “Marenguismo” debe terminar
Manuel Marengo es uno de esos jugadores que apuntaban maneras, ilusionaron mucho y cumplieron poco.
Fue parte de esa sub 23 de Freddy Ternero que asombró en los amistosos previos al torneo y que fracasó estrepitosamente en él. Cómo suele ser costumbre.
Fue parte de esa desinteligencia con Julio César Balerio en el gol que nos dejó sin Copa Libertadores, pero también uno de los bastiones que nos llevó a esa final. Un delantero convertido en central, veloz, técnico y fuerte.
Sólo que se lesionaba con una facilidad escalofriante.
Estuvo en Cristal 5 años, de los que se pasó más de la mitad – no es exageración – lesionado. Durante esos cinco años se le renovó contrato lesionado, hasta dos veces. Hasta que el 2002 Paulo Autuori le dió de baja por bajo rendimiento. Cinco años y lesiones graves encadenadas convirtieron al central más prometedor de esa generación en una vulnerabilidad.
Quedémonos con esa idea; cómo una lesión puede acabar con un jugador.
Acá Cristal compró a un jugador con talento pero una cadena de lesiones lo convirtió en una sombra de lo que era. Otro detalle, no obstante las lesiones se le renovó contrato hasta en dos ocasiones llegando a pasar la vigencia de uno de ellos lesionado.
Es decir, parte del presupuesto anual de Cristal se fue en pagar a un jugador que no podía ser usado pero que tampoco era barato y cuya existencia impedía una visión correcta del plantel.
Ahora, esto no sería tan malo si fuera un incidente aislado.
Se contrató a José Soto – la última vez que vino a Cristal – lesionado y no jugó un solo partido completo, al terminar su contrato se fue a Alianza Lima.
Se trajo – más recientemente – a Adan Balbin viniendo de una lesión y comenzando a acusar los efectos de la misma en su rendimiento y las lesiones nos impidieron ver a un jugador al 100%
Pero más importante, se renovó a un jugador como Joazhiño Arroé que no solamente estaba lesionado, también había dejado claro que prefería estar en otro club. No sé que ha motivado la fe que tres técnicos le han puesto a ese jugador para obviar detalles tan importantes como falta de identificación con la institución y su fragilidad física, pero creo que esta ventana de contratación es una estupenda oportunidad de marcar intención.
Es decir, ¿Cristal realmente tiene un examen médico exhaustivo previo a la contratación? ¿hay manera – médica – de determinar si un jugador es propenso a las lesiones?
En Europa jugadores interesantes como Loic Remy y Sylvain Marveux perdieron contratos importantes porqué los exámenes descubrieron propensión a lesiones o algún otro problema. En el caso de Marveux seis meses después de ese examen tuvo una lesión que lo dejó fuera de juego medio año y demoró mucho en recuperar nivel, en el segundo caso se encontró una falla cardíaca, pero esa misma no le ha impedido alternar en el Chelsea.
Cristal es un club con un bolsillo ajustado, a pesar de ser el club más sólido del país, y debe contratar con mucho cuidado. Los últimos años se ha contratado mucho para la banca o la enfermería y pocos jugadores han logrado convertirse en titulares sin discusión, el título 2015 se pierde justo por eso, por poca profundidad en la banca.
Tenemos un año con grandes retos y rivales complicados, es necesario que esta vez las complicaciones solo vengan de fuera y no de la Comisión de Fútbol.
Fuente: www.elcristalcon