CRÓNICAS

El «Doctor» Eloy Campos operaba sin anestesia

Los jóvenes cerveceros nos preguntan quién fue ese personaje de mirada adusta y bigotes a lo Nicomedes Santa Cruz que siempre aparece en fotos de antiguos cuadros celestes.

La Madre Teresa..
Sus mejores años los pasó integrando la temible muralla celeste junto a Fernando ‘Cóndor’ Mellán, Orlando ‘Chito’ De la Torre y Roberto ‘Tito’ Elías. Los delanteros rivales, frente a esa línea de dobermans, antes de atacar al arco rimense tenían que pensarlo dos veces, prefiriendo disparar de media distancia ante el peligro de una violenta amputación ocasionada por un certero guadañazo. Ante esos cuatro angelitos, los macheteros de hoy en día son monjitas de la Congregación de la Madre Teresa de Calcuta.

Metiendo el hombro con abuso..
Eloy Campos Cleque, El doctor Campos (Con este apodo lo bautizó el narrador Oscar Artacho) fue un jugador a quien siempre mencionan entre los defensas más rudos del fútbol peruano. Sin embargo muchos ignoran que Eloy fue uno de los iniciadores en el Perú de la proyección de un back lateral como puntero al estilo del gran Djalma Santos con el Palmeiras.

Eloy Campos ganaba sí o sí, no solo por velocidad, también lo hacía por fuerza, por atropellada, disputando la pelota como en una carrera de galgos, luchándola codo a codo con el puntero y el lateral rivales.

Muy fácil se la podrían quitar con sólo un empujón, pero Eloy era fuerte y metía el hombro (“con abuso” decía Pocho Rospigliosi) de tal modo que quien resultaba yéndose de cara contra la pista de ceniza era el rival. Y desde la línea del córner la centraba para que la pesque quien venía a la carrera, ya sea el Jet Gallardo, Califa Gonzales Pajuelo, El Gato Vásquez, Pepe del Castillo o Tadeo Risco. Con la misma fuerza regresaba a todo galope hacia su posición de lateral.

No obstante cuando defendía era otra historia, el guepardo cazador se transformaba en pitbull guardián. Si del rival la picaba a sus espaldas, entonces Eloy se convertía en el doctor del que hoy habla la leyenda..

Su primera arma era su famosa carretilla. Se lanzaba deslizándose por el gramado como un esquiador con ambos pies hacia adelante sin medir las consecuencias. Sus temibles chimpunes siempre chocaban con algo, ya sea la pelota, la canilla, la rodilla y la mayoría de las veces hasta el muslo del infortunado rival.

De puntero..
El DT alemán Rudi Gutendorf, viendo la velocidad y el fuelle que tenía, cierta vez lo hizo arrancar de wing. Total, acostumbrado a hacer el ida y vuelta, terminó el partido en su posición inicial, porque la cancha le quedaba chica.

Una Anécdota..
Le anotó un gol al arquero ruso Lev Yashin, ‘La Araña Negra’, entonces considerado el mejor arquero del mundo. Eloy centró con bote, el Gato Vásquez saltó por encima de la pelota mas no alcanzó a tocarla. El balón se metió por el lado contrario donde la esperaba Yashin. El gol se lo adjudicaron a Vásquez.

Para la historia..
Fue el primer futbolista peruano en recibir una tarjeta amarilla. Esto sucedió en el mundial de México 70’ en el inolvidable triunfo 3 a 2 contra Bulgaria. Didí, temiendo su expulsión, lo cambió por Javier “Muerto” Gonzales.

Una frase..“Yo siempre juego con fuerza a la pelota, si el rival choca con mis chimpunes ese es su problema”.

Por: Manuel Araníbar Luna